

La Real, Venerable e Ilustre
Hermandad de Nuestra Señora del Amparo celebró un año más festivamente el Inmaculado
Corazón de María, día grande en la Hermandad recuperado en 2005 con motivo de
los actos del CCL aniversario del Voto Parroquial de 1755. En 1835 fue la
primera Hermandad en rendir culto al Sagrado Corazón de María en la
Archidiócesis en razón de portarlo desde siempre la Santísima Virgen en su mano
derecha. El 7 de noviembre
de 1943, fiel a los designios de S.S. Pío XII, la Hermandad se consagró al
Inmaculado Corazón de María en función celebrada por el Cardenal don Pedro
Segura y Sáenz. Su dulcísima Imagen, por expreso deseo del referido Prelado, se
alza en el monumento a los Sagrados Corazones de la sevillana localidad de San
Juan de Aznalfarache representando al Sagrado Corazón de María. Este monumento
fue bendecido el 19 de marzo de 1944, siendo obra de José Laffita. El complejo
monumental es obra del arquitecto hermano de la Hermandad Don Aurelio Gómez
Millán.
La jornada de este sábado 28 de
junio comenzó temprano para el equipo de priostía que se desplazó a San Juan de
Aznalfarache a primera hora de la mañana para la disposición del altar para la
celebración de la Eucaristía. Desde primera hora el sol anunciaba que hoy
estaría en todo su esplendor veraniego, de ahí que fuera necesario la instalación
de sombrillas para mitigar en lo posible los efectos de la canícula. A las
11:00 daba comienzo la Santa Misa presidida por D. Antonio Rodríguez Babío,
cura párroco de la de la Asunción de Nuestra Señora de Mairena del Alcor. En
las preces se tuvo un recuerdo especial para el Hermano Mayor de la corporación,
Don Juan Jesús Gómez de Terreros, que se encuentra hospitalizado desde hace un
mes. La Eucaristía culminó con el Acto de Consagración de la Hermandad al
Inmaculado Corazón de María, que fue pronunciado por todos los presentes.


Se tuvo la dicha de contar con la
presencia del querido Don Juan Martínez Alcalde y su hermana Doña Rocío. El gran
cofrade de gloria, muy vinculado a la Hermandad por su gran devoción a la
Santísima Virgen del Amparo y que, gracias a Dios, se encuentra muy
restablecido de la penosa enfermedad que lo mantuvo hospitalizado durante tanto
tiempo, quiso entregarle como recuerdo a la Hermandad una pequeña reproducción
de la Virgen del Amparo, obra de José Pérez Conde.






Tras la Santa Misa se visitaron
las Bodegas Salado de la localidad aljarafeña de Umbrete y se almorzó en el
Mesón El Carro de Bollullos de la Mitación. Al término del almuerzo se realizó
una rifa benéfica para las obras de caridad de la Hermandad. Se sorteó un lote
de productos de la perfumería Aromas, un almuerzo o cena para dos personas en
la Taberna Sol y Sombra (C/ Castilla), un almuerzo o cena para dos personas en
La Flor de mi Viña (C/ José de Velilla), un almuerzo o cena para dos personas
en el Mesón el Carro de Bollullos de la Mitación, una cruz de oro y coral y un
relieve de la Santísima Virgen del Amparo.