jueves, 31 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXXIII)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE


SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA


CAPÍTULO TERCERO

CREO EN EL ESPÍRITU SANTO

136. ¿Qué quiere decir la Iglesia cuando confiesa: “Creo en el Espíritu Santo”? (683-686)
Creer en el Espíritu Santo es profesar la fe en la tercera Persona de la Santísima Trinidad, que procede del Padre y del Hijo y “que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria”. El Espíritu Santo “ha sido enviado a nuestros corazones” (Ga 4, 6), a fin de que recibamos la nueva vida de hijos de Dios.

137. ¿Por qué la misión del Hijo y la del Espíritu son inseparables? (687-690; 742-743)
La misión del Hijo y la del Espíritu son inseparables porque en la Trinidad indivisible, el Hijo y el Espíritu son distintos, pero inseparables. En efecto, desde el principio hasta el fin de los tiempos, cuando Dios envía a su Hijo, envía también su Espíritu, que nos une a Cristo en la fe, a fin de que podamos, como hijos adoptivos, llamar a Dios “Padre” (Rm 8, 15). El Espíritu es invisible, pero lo conocemos por medio de su acción, cuando nos revela el Verbo y cuando obra en la Iglesia.

138. ¿Cuáles son los apelativos del Espíritu Santo? (691-693)
“Espíritu Santo” es el nombre propio de la tercera Persona de la Santísima Trinidad. Jesús lo llama también Espíritu Paráclito (Consolador, Abogado) y Espíritu de Verdad. El Nuevo Testamento lo llama Espíritu de Cristo, del Señor, de Dios, Espíritu de la gloria y de la promesa.

139. ¿Con qué símbolos se representa al Espíritu Santo? (694-701)
Son numerosos los símbolos con los que se representa al Espíritu Santo: el agua viva, que brota del corazón traspasado de Cristo y sacia la sed de los bautizados; la unción con el óleo, que es signo sacramental de la Confirmación; el fuego, que transforma cuanto toca; la nube oscura y luminosa, en la que se revela la gloria divina; la imposición de manos, por la cual se nos da el Espíritu; y la paloma, que baja sobre Cristo en su bautismo y permanece en Él.

miércoles, 30 de enero de 2013

DISPONIBLE LA MEMORIA 2012




Tras su presentación en el Cabildo General del pasado domingo día 27 de enero publicamos la Memoria del año 2012 elaborada por la Secretaría de la Hermandad. Pueden consultarla en:

martes, 29 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXXII)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE


SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA


CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS

“DESDE ALLÍ HA DE VENIR A JUZGAR
A VIVOS Y MUERTOS”

133. ¿Cómo reina ahora el Señor Jesús? (668-674; 680)
Como Señor del cosmos y de la historia, Cabeza de su Iglesia, Cristo glorificado permanece misteriosamente en la tierra, donde su Reino está ya presente, como germen y comienzo, en la Iglesia. Un día volverá en gloria, pero no sabemos el momento. Por esto, vivimos vigilantes, pidiendo: “¡Ven, Señor Jesús!” (Ap 22, 20).

134. ¿Cómo se realizará la venida del Señor en la gloria?
(675-677; 680)
Después del último estremecimiento cósmico de este mundo que pasa, la venida gloriosa de Cristo acontecerá con el triunfo definitivo de Dios en la Parusía y con el Juicio final. Así se consumará el Reino de Dios.

135. ¿Cómo juzgará Cristo a los vivos y a los muertos?
(678-679; 681-682)
Cristo juzgará a los vivos y a los muertos con el poder que ha obtenido como Redentor del mundo, venido para salvar a los hombres. Los secretos de los corazones serán desvelados, así como la conducta de cada uno con Dios y el prójimo. Todo hombre será colmado de vida o condenado para la eternidad, según sus obras. Así se realizará “la plenitud de Cristo” (Ef 4, 13), en la que “Dios será todo en todos” (1 Co 15, 28).

lunes, 28 de enero de 2013

INTENCIONES DE LA MISA DIARIA DE 10:30 EN LA CAPILLA

  
Todos los días de lunes a sábado se celebra la eucaristía en la Capilla de Nuestra Señora del Amparo a las 10:30 h. de la mañana. La aplicación de estas misas las gestiona la Hermandad y en estos momentos hay dos días libres. Están libres los días 16 y 31 de cada mes. Cada aplicación tiene un coste de 9 euros por lo que quedarse con las aplicaciones del día 16 tiene un coste anual total de 108 euros y 63 euros en el caso del día 31 (sólo siete meses tienen día 31). Si alguno de estos días cayera en domingo la aplicación se sigue manteniendo en una de las misas de la mañana que se dicen en el Altar Mayor de la Parroquia. 

Es un gesto de caridad cristiana la aplicación de misas por nuestros familiares o amigos difuntos o por la salud de aquellos que están enfermos. También igualmente en acción de gracias. Si estás interesado en hacerte con la aplicación de alguna de estas misas recuerda que cada aplicación son sólo 9 euros y que puedes escoger entre el día 16 y el día 31. Por lo pronto el día 31 de enero está libre. ¿Te interesa colaborar manteniendo el culto a la Santísima Virgen del Amparo y al tiempo aplicar esta misa por tus familiares? Si es así ponte en contacto con la hermandad:
hermandad@hermandaddelamparo.com
Tfno. 954 213 771 (Si no nos encuentras deja el mensaje en el contestador y te llamaremos)

jueves, 24 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXXI)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA


LA PROFESIÓN DE LA FE


SEGUNDA SECCIÓN
LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA


CAPÍTULO SEGUNDO


CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS

"JESUCRISTO DESCENDIÓ A LOS INFIERNOS,
AL TERCER DÍA RESUCITÓ DE ENTRE LOS MUERTOS"


129. ¿Cuál es el estado del cuerpo resucitado de Jesús? (645-646)
La Resurrección de Cristo no es un retorno a la vida terrena. Su cuerpo resucitado es el mismo que fue crucificado, y lleva las huellas de su pasión, pero ahora participa ya de la vida divina, con las propiedades de un cuerpo glorioso. Por esta razón Jesús resucitado es soberanamente libre de aparecer a sus discípulos donde quiere y bajo diversas apariencias.

130. ¿De qué modo la Resurrección es obra de la Santísima Trinidad? (648-650)
La Resurrección de Cristo es una obra trascendente de Dios. Las tres Personas divinas actúan conjuntamente, según lo que es propio de cada una: el Padre manifiesta su poder, el Hijo “recobra la vida, porque la ha dado libremente” (Jn 10, 17), reuniendo su alma y su cuerpo, que el Espíritu Santo vivifica y glorifica.

131. ¿Cuál es el sentido y el alcance salvífico de la Resurrección? (651-655; 658)
La Resurrección de Cristo es la culminación de la Encarnación. Es una prueba de la divinidad de Cristo, confirma cuanto hizo y enseñó y realiza todas las promesas divinas en nuestro favor. Además, el Resucitado, vencedor del pecado y de la muerte, es el principio de nuestra justificación y de nuestra resurrección: ya desde ahora nos procura la gracia de la adopción filial, que es real participación de su vida de Hijo unigénito; más tarde, al final de los tiempos, Él resucitará nuestro cuerpo.

"JESUCRISTO SUBIÓ A LOS CIELOS, Y ESTÁ SENTADO
 A LA DERECHA DE DIOS, PADRE TODOPODEROSO"

132. ¿Qué representa la Ascensión? (659-667)
Cuarenta días después de haberse mostrado a los Apóstoles bajo los rasgos de una humanidad ordinaria, que velaban su gloria de Resucitado, Cristo subió a los cielos y se sentó a la derecha del Padre. Desde entonces el Señor reina con su humanidad en la gloria eterna de Hijo de Dios, intercede incesantemente ante el Padre en favor nuestro, nos envía su Espíritu y nos da la esperanza de llegar un día junto a Él, al lugar que nos tiene preparado.

miércoles, 23 de enero de 2013

CABILDO GENERAL DE CUENTAS

El próximo domingo día 27 de enero a las 12:00 h. en segunda convocatoria se celebrará en la Sacristía de la Parroquia CABILDO GENERAL ORDINARIO DE CUENTAS.



lunes, 21 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXX)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE


SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA


CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS

"JESUCRISTO DESCENDIÓ A LOS INFIERNOS,
AL TERCER DÍA RESUCITÓ DE ENTRE LOS MUERTOS"


125. ¿Qué eran “los infiernos” a los que Jesús descendió”? (632-637)
Los “infiernos” –distintos del “infierno” de la condenación– constituían el estado de todos aquellos, justos e injustos, que habían muerto antes de Cristo. Con el alma unida a su Persona divina, Jesús tomó en los infiernos a los justos que aguardaban a su Redentor para poder acceder finalmente a la visión de Dios. Después de haber vencido, mediante su propia muerte, a la muerte y al diablo “que tenía el poder de la muerte” (Hb 2, 14), Jesús liberó a los justos, que esperaban al Redentor, y les abrió las puertas del Cielo.

126. ¿Qué lugar ocupa la Resurrección de Cristo en nuestra fe? (631. 638)
La Resurrección de Jesús es la verdad culminante de nuestra fe en Cristo, y representa, con la Cruz, una parte esencial del Misterio pascual.

127. ¿Qué “signos” atestiguan la Resurrección de Cristo? (639-644; 656-657)
Además del signo esencial, que es el sepulcro vacío, la Resurrección de Jesús es atestiguada por las mujeres, las primeras que encontraron a Jesús resucitado y lo anunciaron a los Apóstoles. Jesús después “se apareció a Cefas (Pedro) y luego a los Doce, más tarde se apareció a más de quinientos hermanos a la vez” (1 Co 15, 5-6), y aún a otros. Los Apóstoles no pudieron inventar la Resurrección, puesto que les parecía imposible: en efecto, Jesús les echó en cara su incredulidad.

128. ¿Por qué la Resurrección es también un acontecimiento trascendente? (647; 656-657)
La Resurrección de Cristo es un acontecimiento trascendente porque, además de ser un evento histórico, verificado y atestiguado mediante signos y testimonios, transciende y sobrepasa la historia como misterio de la fe, en cuanto implica la entrada de la humanidad de Cristo en la gloria de Dios. Por este motivo, Cristo resucitado no se manifestó al mundo, sino a sus discípulos, haciendo de ellos sus testigos ante el pueblo.

viernes, 18 de enero de 2013

PRESENTACIÓN DE LA CAMPAÑA DE CÁRITAS 2013


El martes día 22 de enero a las 20:45 h. se presentará en la Parroquia la Campaña de Cáritas 2013. El acto que durará escasamente una hora tendrá el siguiente desarrollo:

1.- Presentación del acto por nuestro párroco don Antonio Fernández Estévez

2.- ¿Por qué se hace la campaña de Caritas? por don Manuel Andrés Vecino Martin, director de Cáritas Parroquial

3.- Presentación de la Campaña por doña Pilar Murube Fernández Piedra, trabajadora social de Cáritas Diocesana

4.- Oración de la sencillez

En nombre de nuestro párroco esperamos que hagas llegar al mayor número de personas posible este mensaje para que juntos vayamos creciendo en vida parroquial, en conocimiento personal y en comunidad que nos permita llegar a acciones comunes en nuestra vivencia de la caridad.

Si deseas más información sobre esta campaña puedes ir a la página web de Cáritas Diocesana de Sevilla.

jueves, 17 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXIX)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA


LA PROFESIÓN DE LA FE


SEGUNDA SECCIÓN


LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA


CAPÍTULO SEGUNDO


CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS

“JESUCRISTO PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO,
FUE CRUCIFICADO, MUERTO Y SEPULTADO”
120. ¿Cómo se manifiesta en la última Cena la oblación de Jesús? (610-611; 621)
En la última Cena con los Apóstoles, la víspera de su Pasión, Jesús anticipa, es decir, significa y realiza anticipadamente la oblación libre de sí mismo: “Esto es mi Cuerpo que será entregado por vosotros”, “ésta es mi sangre que será derramada...” (Lc 22, 19-20). De este modo, Jesús instituye, al mismo tiempo, la Eucaristía como “memorial” (1 Co 11, 25) de su sacrificio, y a sus Apóstoles como sacerdotes de la nueva Alianza.

121. ¿Qué sucede en la agonía del huerto de Getsemaní? (612)
En el huerto de Getsemaní, a pesar del horror que suponía la muerte para la humanidad absolutamente santa de Aquél que es “el autor de la vida” (Hch 3, 15), la voluntad humana del Hijo de Dios se adhiere a la voluntad del Padre; para salvarnos acepta soportar nuestros pecados en su cuerpo, “haciéndose obediente hasta la muerte” (Flp 2, 8).

122. ¿Cuáles son los efectos del sacrificio de Cristo en la Cruz? (613-617; 622-623)
Jesús ofreció libremente su vida en sacrificio expiatorio, es decir, ha reparado nuestras culpas con la plena obediencia de su amor hasta la muerte. Este amor hasta el extremo (cf. Jn 13, 1) del Hijo de Dios reconcilia a la humanidad entera con el Padre. El sacrificio pascual de Cristo rescata, por tanto, a los hombres de modo único, perfecto y definitivo, y les abre a la comunión con Dios.

123. ¿Por qué llama Jesús a sus discípulos a cargar con la propia Cruz? (618)
Al llamar a sus discípulos a tomar su cruz y seguirle (cf. Mt 16, 24), Jesús quiere asociar a su sacrificio redentor a aquellos mismos que son sus primeros beneficiarios.

124. ¿En qué condiciones se encontraba el cuerpo de Cristo mientras estaba en el sepulcro? (624-630)
Cristo sufrió una verdadera muerte, y verdaderamente fue sepultado. Pero la virtud divina preservó su cuerpo de la corrupción.

miércoles, 16 de enero de 2013

NOSTALGIA

Extracto del Pregón de las Glorias de Antonio Muñoz Maestre (2005)

Es noviembre en el templo que en la Magdalena solemniza el abrazo de la muerte y la gloria. La Reina entronizada en las alturas sueña con una mañana terrenal, con un amanecer en Nazaret, con el despertar del Hijo, con la primera mirada al sol de cada día, con el trabajo sacrificado de José, con tantas pequeñas cosas que junto a las grandes latían en su corazón y se mezclaban con su sangre. Su ropaje dorado se apaga para asemejarse al lienzo que apenas rozaba el suelo en su caminar por las calles. La Mujer sabe que ya pasó una eternidad desde el dolor, y que nada ni nadie podrá recrear el sufrimiento del Fruto de su vientre. Pero su hogar está lleno de retratos, de recuerdos, unos felices y otros amargos. Desde la oscuridad de su estancia, vislumbra breves lámparas que se estremecen ante la memoria que Ella intenta enterrar en lo más hondo del olvido. Pero el árbol redentor se eleva demasiado cerca, y la Madre mezcla como nadie mezcló nunca la miel y la hiel. A sus pies, el pueblo ruega su Amparo, pero antes, Ella debe despertar del sueño agridulce. Las calles la reclaman para distraer su atención del germen de la nostalgia.
Hay en el cielo un toque de añoranza.
Sobre las altas naves
La bóveda se estira eternamente,
Se despierta el pincel en los murales
Y retrata su rostro soñoliento
Buscando un mundo aparte.

Y pareció imposible
Dibujar la nostalgia en ese instante,
Poner felicidad en el recuerdo
Donde aún quedan huellas de la sangre,
O bien difuminarla en una ausencia
Que cuelga sobre el aire.

La luz, ya moribunda
Agoniza en faroles y ciriales,
Recordando cortejos de nobleza
De tantos años antes.
Amparo la nombraron las miradas,
Amparo le pidió por sus pesares
La voz callada y sorda
Que reza sus misterios cada tarde.

En un bosque de velas,
Su mirada es espejo de diamante
Donde mueren las glorias de Sevilla
Hasta que suenen cantos de azahares,
Que tras Ella es el fin,
Y el Adviento ya acerca su mensaje.

Adiós, hasta muy pronto,
El otoño repite en una salve.
Adiós, y una última mirada
A la leve sonrisa de su Madre.

martes, 15 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXVIII)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE

SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA

CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS
“JESUCRISTO PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO,
FUE CRUCIFICADO, MUERTO Y SEPULTADO
 
116. ¿Contradijo Jesús la fe de Israel en el Dios Único y Salvador? (587-591; 594)
Jesús nunca contradijo la fe en un Dios único, ni siquiera cuando cumplía la obra divina por excelencia, que realizaba las promesas mesiánicas y lo revelaba como igual a Dios: el perdón de los pecados. La exigencia de Jesús de creer en Él y convertirse permite entender la trágica incomprensión del Sanedrín, que juzgó que Jesús merecía la muerte como blasfemo.

117. ¿Quién es responsable de la muerte de Jesús? (595-598)
La pasión y muerte de Jesús no pueden ser imputadas indistintamente al conjunto de los judíos que vivían entonces, ni a los restantes judíos venidos después. Todo pecador, o sea todo hombre, es realmente causa e instrumento de los sufrimientos del Redentor; y aún más gravemente son culpables aquellos que más frecuentemente caen en pecado y se deleitan en los vicios, sobre todo si son cristianos.

118. ¿Por qué la muerte de Cristo forma parte del designio de Dios? (599-605; 619)
Al fin de reconciliar consigo a todos los hombres, destinados a la muerte a causa del pecado, Dios tomó la amorosa iniciativa de enviar a su Hijo para que se entregara a la muerte por los pecadores. Anunciada ya en el Antiguo Testamento, particularmente como sacrificio del Siervo doliente, la muerte de Jesús tuvo lugar según las Escrituras. 
 
119. ¿De qué modo Cristo se ofreció a sí mismo al Padre? (606-609; 620)
Toda la vida de Cristo es una oblación libre al Padre para dar cumplimiento a su designio de salvación. Él da “su vida como rescate por muchos” (Mc 10, 45), y así reconcilia a toda la humanidad con Dios. Su sufrimiento y su muerte manifiestan cómo su humanidad fue el instrumento libre y perfecto del Amor divino, que quiere la salvación de todos los hombres.
 

jueves, 10 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXVII)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE

SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA

CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS
“JESUCRISTO PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO,
FUE CRUCIFICADO, MUERTO Y SEPULTADO”

112. ¿Por qué es tan importante el Misterio pascual de Jesús? (571-573)
El misterio pascual de Jesús, que comprende su Pasión, Muerte, Resurrección y Glorificación, está en el centro de la fe cristiana, porque el designio salvador de Dios se ha cumplido de una vez por todas con la muerte redentora de su Hijo, Jesucristo.

113. ¿Bajo qué acusaciones fue condenado Jesús? (574-576)
Algunos jefes de Israel acusaron a Jesús de actuar contra la Ley, contra el Templo de Jerusalén y, particularmente, contra la fe en el Dios único, porque se proclamaba Hijo de Dios. Por ello lo entregaron a Pilato para que lo condenase a muerte.

114. ¿Cómo se comportó Jesús con la Ley de Israel? (577-582; 592)
Jesús no abolió la Ley dada por Dios a Moisés en el Sinaí, sino que la perfeccionó, dándole su interpretación definitiva. Él es el Legislador divino que ejecuta íntegramente esta Ley. Aún más, es el siervo fiel que, con su muerte expiatoria, ofrece el único sacrificio capaz de redimir todas “las transgresiones cometidas por los hombres contra la Primera Alianza” (Hb 9, 15).

115. ¿Cuál fue la actitud de Jesús hacia el Templo de Jerusalén? (583-586; 593)
Jesús fue acusado de hostilidad hacia al Templo. Sin embargo, lo veneró como “la casa de su Padre” (Jn 2, 16), y allí impartió gran parte de sus enseñanzas. Pero también predijo la destrucción del Templo, en relación con su propia muerte, y se presentó a sí mismo como la morada definitiva de Dios en medio de los hombres. 


martes, 8 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXVI)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE

SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA

CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS
“JESUCRISTO FUE CONCEBIDO
POR OBRA DEL ESPÍRITU SANTO
Y NACIÓ DE SANTA MARÍA VIRGEN”

107. ¿Quién es invitado a formar parte del Reino de Dios, anunciado y realizado por Jesús? (541-546; 567)
Jesús invita a todos los hombres a entrar en el Reino de Dios; aún el peor de los pecadores es llamado a convertirse y aceptar la infinita misericordia del Padre. El Reino pertenece, ya aquí en la tierra, a quienes lo acogen con corazón humilde. A ellos les son revelados los misterios del Reino de Dios.

108. ¿Por qué Jesús manifiesta el Reino mediante signos y milagros? (547-550; 567)
Jesús acompaña su palabra con signos y milagros para atestiguar que el Reino está presente en Él, el Mesías. Si bien cura a algunas personas, Él no ha venido para abolir todos los males de esta tierra, sino ante todo para liberarnos de la esclavitud del pecado. La expulsión de los demonios anuncia que su Cruz se alzará victoriosa sobre “el príncipe de este mundo” (Jn 12, 31).

109. ¿Qué autoridad confiere Jesús a sus Apóstoles en el Reino? (551-553; 567)
Jesús elige a los Doce, futuros testigos de su Resurrección, y los hace partícipes de su misión y de su autoridad para enseñar, absolver los pecados, edificar y gobernar la Iglesia. En este colegio, Pedro recibe “las llaves del Reino” (Mt 16, 19) y ocupa el primer puesto, con la misión de custodiar la fe en su integridad y de confirmar en ella a sus hermanos.

110. ¿Cuál es el significado de la Transfiguración? (554-556; 568)
En la Transfiguración de Jesús aparece ante todo la Trinidad: “el Padre en la voz, el Hijo en el hombre, el Espíritu en la nube luminosa” (Santo Tomás de Aquino). Al evocar, junto a Moisés y Elías, su “partida” (Lc 9, 31), Jesús muestra que su gloria pasa a través de la cruz, y otorga un anticipo de su resurrección y de su gloriosa venida, “que transfigurará este miserable cuerpo nuestro en un cuerpo glorioso como el suyo” (Flp 3, 21).

“En el monte te transfiguraste, Cristo Dios, y tus discípulos contemplaron tu gloria, en cuanto podían comprenderla. Así, cuando te viesen crucificado entenderían que padecías libremente y anunciarían al mundo que tú eres en verdad el resplandor del Padre” (Liturgia bizantina).


111. ¿Cómo tuvo lugar la entrada mesiánica de Jesús en Jerusalén? (557-560; 569-570)
En el tiempo establecido, Jesús decide subir a Jerusalén para sufrir su Pasión, morir y resucitar. Como Rey-Mesías que manifiesta la venida del Reino, entra en la ciudad montado sobre un asno; y es acogido por los pequeños, cuya aclamación es recogida por el Sanctus de la Misa: “¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna! (¡sálvanos!)” (Mt 21, 9). Con la celebración de esta entrada en Jerusalén la liturgia de la Iglesia da inicio cada año a la Semana Santa.

jueves, 3 de enero de 2013

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXV)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE

SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA

CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS
“JESUCRISTO FUE CONCEBIDO
POR OBRA DEL ESPÍRITU SANTO
Y NACIÓ DE SANTA MARÍA VIRGEN”

104. ¿Qué nos enseña la vida oculta de Jesús en Nazaret? (533-534; 564)
Durante la vida oculta en Nazaret, Jesús permanece en el silencio de una existencia ordinaria. Nos permite así entrar en comunión con Él en la santidad de la vida cotidiana, hecha de oración, sencillez, trabajo y amor familiar. La sumisión a María y a José, su padre legal, es imagen de la obediencia filial de Jesús al Padre. María y José, con su fe, acogen el misterio de Jesús, aunque no siempre lo comprendan.

105. ¿Por qué Jesús recibe de Juan el “Bautismo de conversión para el perdón de los
pecados”
(Lc 3, 3)? (535-537;565)
Jesús recibe de Juan el Bautismo de conversión para inaugurar su vida pública y anticipar el “Bautismo” de su Muerte; y aunque no había en Él pecado alguno, Jesús, “el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo” (Jn 1, 29), acepta ser contado entre los pecadores. El Padre lo proclama su “Hijo predilecto” (Mt 3, 17), y el Espíritu viene a posarse sobre Él. El Bautismo de Jesús es la prefiguración de nuestro bautismo.

106. ¿Qué nos revelan las tentaciones de Jesús en el desierto? (538-540; 566)
Las tentaciones de Jesús en el desierto recapitulan la de Adán en el paraíso y las de Israel en el desierto. Satanás tienta a Jesús en su obediencia a la misión que el Padre le ha confiado. Cristo, nuevo Adán, resiste, y su victoria anuncia la de su Pasión, en la que su amor filial dará suprema prueba de obediencia. La Iglesia se une particularmente a este Misterio en el tiempo litúrgico de la Cuaresma.

martes, 1 de enero de 2013

FELIZ AÑO NUEVO

Solemnidad de Santa María, Madre de Dios

 
La Solemnidad de Santa María Madre de Dios es la primera Fiesta Mariana que apareció en la Iglesia Occidental, su celebración se comenzó a dar en Roma hacia el siglo VI, probablemente junto con la dedicación –el 1º de enero– del templo “Santa María Antigua” en el Foro Romano, una de las primeras iglesias marianas de Roma.
 
La antigüedad de la celebración mariana se constata en las pinturas con el nombre de “María, Madre de Dios” (Theotókos) que han sido encontradas en las Catacumbas o antiquísimos subterráneos que están cavados debajo de la ciudad de Roma, donde se reunían los primeros cristianos para celebrar la Misa en tiempos de las persecuciones.
 
Más adelante, el rito romano celebraba el 1º de enero la octava de Navidad, conmemorando la circuncisión del Niño Jesús. Tras desaparecer la antigua fiesta mariana, en 1931, el Papa Pío XI, con ocasión del XV centenario del concilio de Éfeso (431), instituyó la Fiesta Mariana para el 11 de octubre, en recuerdo de este Concilio, en el que se proclamó solemnemente a Santa María como verdadera Madre de Cristo, que es verdadero Hijo de Dios; pero en la última reforma del calendario –luego del Concilio Vaticano II– se trasladó la fiesta al 1 de enero, con la máxima categoría litúrgica, de solemnidad, y con título de Santa María, Madre de Dios.
 
De esta manera, esta Fiesta Mariana encuentra un marco litúrgico más adecuado en el tiempo de la Navidad del Señor; y al mismo tiempo, todos los católicos empezamos el año pidiendo la protección de la Santísima Virgen María.
 
El Concilio de Éfeso
 
En el año de 431, el hereje Nestorio se atrevió a decir que María no era Madre de Dios, afirmando: “¿Entonces Dios tiene una madre? Pues entonces no condenemos la mitología griega, que les atribuye una madre a los dioses”. Ante ello, se reunieron los 200 obispos del mundo en Éfeso –la ciudad donde la Santísima Virgen pasó sus últimos años– e iluminados por el Espíritu Santo declararon: “La Virgen María sí es Madre de Dios porque su Hijo, Cristo, es Dios”. Y acompañados por todo el gentío de la ciudad que los rodeaba portando antorchas encendidas, hicieron una gran procesión cantando: "Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén".
 
Asimismo, San Cirilo de Alejandría resaltó: “Se dirá: ¿la Virgen es madre de la divinidad? A eso respondemos: el Verbo viviente, subsistente, fue engendrado por la misma substancia de Dios Padre, existe desde toda la eternidad... Pero en el tiempo él se hizo carne, por eso se puede decir que nació de mujer”.
 
Madre del Niño Dios
 
“He aquí la sierva del Señor, hágase en mí según tu palabra”
 
Es desde ese fiat, hágase que Santa María respondió firme y amorosamente al Plan de Dios; gracias a su entrega generosa Dios mismo se pudo encarnar para traernos la Reconciliación, que nos libra de las heridas del pecado.
 
La doncella de Nazareth, la llena de gracia, al asumir en su vientre al Niño Jesús, la Segunda Persona de la Trinidad, se convierte en la Madre de Dios, dando todo de sí para su Hijo; vemos pues que todo en ella apunta a su Hijo Jesús.
 
Es por ello, que María es modelo para todo cristiano que busca día a día alcanzar su santificación. En nuestra Madre Santa María encontramos la guía segura que nos introduce en la vida del Señor Jesús, ayudándonos a conformarnos con Él y poder decir como el Apóstol “vivo yo más no yo, es Cristo quien vive en mí” (Gál 2,20).

AÑO DE LA FE. COMPENDIO DEL CATECISMO (XXIV)

COMPENDIO DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA

LA PROFESIÓN DE LA FE

SEGUNDA SECCIÓN

LA PROFESIÓN DE LA FE CRISTIANA

CAPÍTULO SEGUNDO

CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS
“JESUCRISTO FUE CONCEBIDO
POR OBRA DEL ESPÍRITU SANTO
Y NACIÓ DE SANTA MARÍA VIRGEN”


101. ¿En qué sentido toda la vida de Cristo es Misterio? (512-521; 561-562)
Toda la vida de Cristo es acontecimiento de revelación: lo que es visible en la vida terrena de Jesús conduce a su Misterio invisible, sobre todo al Misterio de su filiación divina: “quien me ve a mí ve al Padre” (Jn 14, 9). Asimismo, aunque la salvación nos viene plenamente con la Cruz y la Resurrección, la vida entera de Cristo es misterio de salvación, porque todo lo que Jesús ha hecho, dicho y sufrido tenía como fin salvar al hombre caído y restablecerlo en su vocación de hijo de Dios.

102. ¿Cuáles han sido las preparaciones históricas a los Misterios de Jesús? (522-524)
Ante todo hay una larga esperanza de muchos siglos, que revivimos en la celebración litúrgica del tiempo de Adviento. Además de la oscura espera que ha puesto en el corazón de los paganos, Dios ha preparado la venida de su Hijo mediante la Antigua Alianza, hasta Juan el Bautista, que es el último y el mayor de los Profetas.

103. ¿Qué nos enseña el Evangelio sobre los Misterios del nacimiento y la infancia de Jesús? (525-530; 563-564)
En el Nacimiento de Jesús, la gloria del cielo se manifiesta en la debilidad de un niño; la circuncisión es signo de su pertenencia al pueblo hebreo y prefiguración de nuestro Bautismo; la Epifanía es la manifestación del Rey-Mesías de Israel a todos los pueblos; durante la presentación en el Templo, en Simeón y Ana se concentra toda la expectación de Israel, que viene al encuentro de su Salvador; la huida a Egipto y la matanza de los inocentes anuncian que toda la vida de Cristo estará bajo el signo de la persecución; su retorno de Egipto recuerda el Éxodo y presenta a Jesús como el nuevo Moisés: Él es el verdadero y definitivo liberador.